El Heberprovac, medicamento terapéutico basado en la supresión de la producción de testosterona, fue obtenido por especialistas del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) del territorio, y ha demostrado su impacto en la normalización de los marcadores tumorales, reseña Lianet Leandro López en la web de la AIN.
Aunque aún se encuentra en estadíos tempranos de experimentación, se probó que los más de 50 pacientes incluídos en el ensayo muestran favorables indicadores como la reducción de las células malignas y de los síntomas obstructivos urinarios propios de la enfermedad.
Franklin Fuentes Aguilar, investigador del proyecto en el CIGB camagüeyano, explicó a la AIN que si bien la alternativa, aplicada en las etapas III y IV de la enfermedad, no constituye una cura, sí influye positivamente en la calidad de vida y supervivencia de los aquejados.
El Heberprovac provoca la disminución de los niveles de la hormona masculina, lo cual repercute favorablemente en la reducción de los valores del Antígeno Prostático Específico- conocido como PSA por sus siglas en inglés- y en la regresión del tamaño de ese órgano, signos de que el cáncer se mantiene controlado, comentó.
En una próxima etapa de ensayo clínico, para la cual actualmente se prepara el protocolo, se hará un estudio comparativo entre el candidato vacunal y el Zoladex, la mejor terapia existente en el mundo para esa dolencia.
El cáncer es la primera causa de muerte en el país, y el de próstata es el segundo de mayor mortalidad entre los hombres, luego del de pulmón, tráquea y bronquios, con casi dos mil 800 defunciones en 2013, según datos del Anuario Estadístico del Ministerio de Salud Pública.
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