Al término del diálogo, solo se brindó a la prensa una escueta nota oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores cubano para dejar constancia de haber sostenido intercambios de criterios entre las partes y expresar la disposición de proseguir dialogando, sin aportar otros elementos, al igual que hizo la parte visitante.
Esta realidad ha dado motivos a la prensa internacional a emitir especulaciones, y en particular a quienes intentan torpedear el acercamiento civilizado entre Cuba y Estados unidos, luego de 56 años de profundos diferendos.
Lo cierto es que el intercambio diplomático es un proceso complejo donde las soluciones y acuerdos se verán a largo plazo. No obstante, constituye una oportunidad histórica de mejorar las relaciones entre ambos países.
Otros asuntos abiertos a la agenda común abordan las telecomunicaciones, la protección de áreas marinas y los derechos humanos, como recientemente anunciara Josefina Vidal Ferreiro, directora general de Estados Unidos de la cancillería cubana, en conferencia de prensa. La diplomática afirmó que sí es posible tener reuniones de carácter técnico con EE.UU., independientemente del proceso paralelo para restablecer relaciones diplomáticas.
Entre los medios de prensa estadounidenses que hoy tratan el tema con mayor seriedad, destaca el New York Times, al afirmar que las conversaciones entre Cuba y Estados Unidos han sido positivas y constructivas, citando como fuente declaraciones de Jen Psaki, la portavoz del Departamento de Estado, quien hizo comentarios similares en Washington. (Por: Roberto Pérez Betancourt)(20/03/15)
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