Uno de los objetivos de la cruzada es tratar de limitar los factores de riesgo de los transeúntes, en particular niños y adultos- considerados los más vulnerables- aunque también incluye el rol de los conductores y su desatención al mando del vehiculo.
Al respecto, especialitas de la Dirección Nacional de Tránsito ejemplificaron que en el período 2010-2014 murieron por imprudencias mil 035 personas y seis mil 385 sufrieron lesiones, todo lo cual implicó un promedio diario de uno y tres, respectivamente.
Especificaron que emprenderán acciones en los lugares de mayor complejidad, circulación y ocurrencia de percances, entre ellas el empleo combinado de las fuerzas de enfrentamiento del sistema policiaco, emisión de mensajes, alertas y llamadas de atención, notificaciones preventivas e imposición de multas.
Advirtieron acerca de la necesidad de que los caminantes deben mirar hacia ambos lados a la hora de cruzar una calle y no hacerlo por detrás o delante de vehículos detenidos o cuando están en proceso de paralizar su marcha.
También deben observar las señales del control de tránsito, semáforos, marcas horizontales y los pasos peatonales e incluso evitar caminar por las calzadas, ni jugar en ellas, correr o empujar a las personas en ningún momento y mucho menos ingerir bebidas alcohólicas, tanto ellos como los choferes.
Respecto a estos últimos, deben mantener la máxima atención en su labor de transportista a una velocidad adecuada y respetar los derechos de los peatones.
La CNSV prevé también campañas sobre cinturón de seguridad, revisión técnica y transportación masiva, y la de distracción en la conducción, mediante la comunicación por celular cuando se está al volante. (Tomado de la AIN)(12/02/15)
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