Enclavado en el Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas Carlos Marx, el centro involucra a alumnos bajo la tutela de expertos en la manipulación de los alacranes, cuyo veneno contiene proteínas con propiedades analgésicas y antiinflamatorias.
Saúl Santana, especialista principal de la instalación, comentó que consta de dos áreas de cría e incluye un local de cuarentena para facilitar solo la recepción de ejemplares sanos, tomados del entorno natural con la precaución de no sobreexplotar sus poblaciones.
Mediante estímulos eléctricos de baja intensidad, una vez al mes se realiza el ordeño de cada uno de los arácnidos, de los cuales se mantiene un cuidadoso registro que incluye, entre otros datos, la fecha de entrada y lugar de procedencia, explicó Santana.
Detalló el investigador que los escorpiones proceden de zonas de captura situadas en la urbe yumurina y el municipio de Limonar, de la propia provincia matancera, a las cuales se devuelve la mayoría luego de concluido el periodo previsto para el aprovechamiento de su veneno.
La existencia de un centro de reproducción de entomófagos y entomopatógenos en la periferia de esta misma ciudad, garantiza a los animales de la especie Rhopalurus junceus, endémica de Cuba, la dieta a base de larvas ricas en nutrientes necesarios para su sustento.
Isbel González, directora de investigación y desarrollo de LABIOFAM, precisó que el VIDATOX 30 CH se encuentra en la actualidad registrado en más de una decena de países, tales como Chile, Bolivia, Ecuador, Guatemala, México, Laos, Sudáfrica y Nigeria.
Al decir de González, el producto bioterapéutico marca la diferencia para muchas personas aquejadas de diferentes tipos de cáncer pues, si bien no es una cura para la enfermedad, si contribuye a mejorar significativamente la calidad de vida de los pacientes. (Tomado de la web de la AIN)(22/12/14)
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