Investigadores del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), en colaboración con el hospital Juan Bruno Zayas, de Santiago de Cuba, crearon un fármaco eficaz y seguro en forma de supositorio para el tratamiento de las hemorroides agudas, basado en el empleo de la estreptoquinasa recombinante.
Luego de varios años de ensayos clínicos realizados en instituciones de salud de doce provincias, el medicamento obtuvo su registro sanitario en el 2012 con el nombre de Proctokinasa y está llamado a convertirse en un futuro no lejano en la terapia más recomendada contra la mencionada dolencia en el país, en la medida en que el crecimiento de las capacidades productivas lo permitan.
A diferencia de las formulaciones de aplicación local existentes que centran su principal acción en la disminución de la inflamación y el dolor, estos supositorios, además de cumplir las referidas funciones, logran eliminar los coágulos de sangre presentes en la región anal afectada, obteniéndose al quinto día de empleo una mejoría del cuadro clínico de la crisis hemorroidal en el orden del 75 al 90 por ciento.
Este producto mereció recientemente uno de los Premios Nacionales de la Academia de Ciencias de Cuba correspondiente al 2013, en el acápite de Ciencias Biomédicas, y junto con su contribución a resolver un problema de salud frecuente en nuestro entorno y a nivel mundial, tiene la potencialidad para convertirse en otro rubro exportable de la biotecnología cubana.
(Tomado por Granma, escrito por Orfilio Peláez)
Luego de varios años de ensayos clínicos realizados en instituciones de salud de doce provincias, el medicamento obtuvo su registro sanitario en el 2012 con el nombre de Proctokinasa y está llamado a convertirse en un futuro no lejano en la terapia más recomendada contra la mencionada dolencia en el país, en la medida en que el crecimiento de las capacidades productivas lo permitan.
A diferencia de las formulaciones de aplicación local existentes que centran su principal acción en la disminución de la inflamación y el dolor, estos supositorios, además de cumplir las referidas funciones, logran eliminar los coágulos de sangre presentes en la región anal afectada, obteniéndose al quinto día de empleo una mejoría del cuadro clínico de la crisis hemorroidal en el orden del 75 al 90 por ciento.
Este producto mereció recientemente uno de los Premios Nacionales de la Academia de Ciencias de Cuba correspondiente al 2013, en el acápite de Ciencias Biomédicas, y junto con su contribución a resolver un problema de salud frecuente en nuestro entorno y a nivel mundial, tiene la potencialidad para convertirse en otro rubro exportable de la biotecnología cubana.
(Tomado por Granma, escrito por Orfilio Peláez)
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