Así podríamos seguir enumerando antagonismos y absurdos existenciales, algunos de los cuales cada día ponen más en riesgo la sobrevivencia de la propia especie humana.
Ejemplo concreto lo tenemos en dos hechos a la vista: los reconocidos efectos nocivos del tabaco y la permanencia y expansión de la agroindustria y el comercio que fomentan el tabaquismo; los daños constatados a escala mundial por el fatal alcoholismo, y las crecientes novedades de los negocios que hacen fortuna a costa del vicio de los alcohólicos, y de quienes se inician en esa patología incurable o transitan hacia ella. La más reciente noticia al respecto llega de Estados Unidos, donde acaba de aprobarse la venta del llamado Palcohol, primer alcohol en polvo.
La promoción de la nueva mercancía indica que basta diluir el polvo en agua o jugo de frutas para tener una agradable bebida alcohólica, emborrachable, por supuesto.
Entre otras ventajas se aduce el poco peso y la fácil transportación personal del alcohol en polvo, lo que permitirá su trasiego incluso en recintos donde no se permiten bebidas espirituosas, y obviamente que jóvenes, adultos y ancianos adictos se refocilen violando prohibiciones de consumo.Ya se ven llegar las iniciativas para una rápida borrachera.
Los fabricantes alegan que el alcohol en polvo será más barato que las costosas bebidas alcohólicas de marca, y aunque aconsejan moderación al beber, ya disponen de siete diferentes versiones del Palcohol saborizado, aprobadas graciosamente por la agencia de impuestos y comercio de alcohol y tabaco de Estados Unidos, todo lo que seguramente expandirá también las reuniones de alcohólicos anónimos para autoflagelaciones, y contribuirá a seguir expandiendo los dilemas existenciales de los humanos entre el ser y el no ser.
Cosas veredes, amigo Sancho.
(Por: Roberto Pérez Betancourt)
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