En el acto conmemorativo que se efectúa en la Plaza Roja de Moscú, en esta fecha, está presente el presidente cubano Raúl Castro, en representación del gobierno y el pueblo de Cuba.
La conflagración se extendió por espacio de cerca de cinco años, en los que la ex Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) batalló durante mil 341 días en la que fue llamada allí la Gran Guerra Patria, porque de sus resultados se derivaría el futuro, no solo de ese pueblo, sino de buena parte de la humanidad.
Más de 25 millones de vidas y el 30 por ciento de la riqueza nacional de la URSS costó aquella aventura descabellada emprendida por Adolfo Hitler al frente de Alemania y del nazi-fascismo.
Sin demeritar la labor de resistencia de otras naciones que fueron invadidas, o que participaron en la coalición aliada contra los invasores, en especial de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y China, la verdad histórica reconoce el papel decisivo de los soviéticos en evitar que aquel engendro de odio, xenofobia y racismo se extendiera por el mundo.
Cuba, cuyos hijos también participaron en el frente aliado, igualmente rememora aquellos sucesos y este día rinde homenaje a los mártires y héroes que entregaron sus vidas a favor del futuro de la humanidad.
Expertos analistas han reconocido que la unión integrada frente al fascismo fue decisiva en la lucha y demostró la potencialidad de la conjunción de voluntades políticas y económicas en pos de un noble objetivo, experiencia que lamentablemente, no ha sido asimilada debidamente en la post guerra, pues desde que finalizó aquella Segunda Guerra Mundial, la humanidad ha asistido, y aún hoy es testigo, de otras conflagraciones desatadas por la ambición neoliberal y el neofascismo a través del pillaje, la rapiña y las banderas del racismo.
Habida cuenta esa realidad, en este minuto de recordación y recuento es menester tener presente el alerta del gran periodista y revolucionario checo Julius Fucik, asesinado por los fascistas, quien, antes de morir en la horca, en su reportaje escrito desde la prisión dejó este mensaje de innegable actualidad: “¡Hombres, estad alertas!”
Roberto Pérez Betancourt
Publicar un comentario