Transcurrido mes y medio de este año 2015, resaltan esfuerzos y avances en pos de los objetivos económicos acordados por el Parlamente cubano, sobre la base de las directivas del Congreso del Partido, y también aparecen áreas aún de insuficientes indicadores en las que es menester acentuar las acciones orientadas en pos de alcanzar los índices de crecimiento económico indispensables para el desarrollo progresivo de nuestro socialismo sobre bases realistas y sustentables.
En primer lugar destaca la posibilidad de aprovechar aún más las reservas internas de eficiencia, lo que se debe alcanzar con mejor aprovechamiento de la jornada laboral y la disponibilidad de materias primas y materiales, especialmente en las áreas turísticas –locomotora del desarrollo económico-, el sector manufacturero y la gestión agropecuaria y azucarera, en las que se identifican múltiples posibilidades de ensanchar la producción y la productividad, siempre que los colectivos laborales hagan el mejor empleo de los recursos materiales puestos a su disposición y cumplan las normas técnicas establecidas por especialistas con el propósito de aspirar a elevar los rendimientos.
La reanimación de la industria manufacturera requiere el reforzamiento de recursos básicos para elevar sus aportes mercantiles al comercio interno y la sustitución de importaciones, en tanto los expertos recuerdan que el crecimiento de las inversiones debe encaminarse sobre todo a la actividad productiva y de infraestructura, donde existen puntos de ensanchamiento de la producción y los servicios, que con pocos recursos pueden retribuir beneficios cuantitativos importantes para la creación de nuevos valores, y por ende para el crecimiento y el desarrollo económico.
Todos los enunciados, constituyen planteamientos válidos, incluidos en el Plan de la Economía para el año 2015, que han de estar permanentemente en el punto de enfoque cotidiano de dirigentes y funcionarios en todas las ramas del quehacer, en la provincia de Matanzas y en todo el país. (TVY)(19/02/15)
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