Este último, bajo el título de Un nuevo rumbo para Cuba, ordenó la apertura de un sitio web en Internet para precisar el alcance de las disposiciones enunciadas. Allí se detallan temas migratorios, operaciones antidrogas, protección medioambiental y tráfico de personas, así como los pasos que dará Washington para mejorar las políticas de viaje y remesas monetarias que residentes en Estados Unidos envían a Cuba.
Por ahora se anuncian las licencias generales que se otorgarán a los viajeros autorizados que califiquen en las categorías de visitas familiares, negocios oficiales del gobierno estadounidense, extranjeros y organizaciones intergubernamentales, actividad periodística, e investigación y reuniones profesionales.
También se incluyen entre las autorizaciones para viajar a nuestro país a quienes realicen actividades educativas y religiosas, actuaciones públicas, clínicas, talleres, competiciones atléticas y otras, exhibiciones, actividades de fundaciones, investigación o instituciones educativas privadas, y la exportación, importación o transmisión de información o materiales de información.
El sitio web abierto por la Casa Blanca detalla la implementación de medidas con el propósito de aumentar ventas y exportaciones de ciertos bienes y servicios desde Estados Unidos a Cuba, así como permisos a los estadounidenses para importar bienes adicionales desde la isla, incluidas bebidas alcohólicas y tabacos. No es todavía la autorización para el gran flujo de turistas estadounidenses hacia nuestras costas, ni el levantamiento del bloqueo económico, comercial y financiero que durante más de 55 años ha intentado estrangular a las familias cubanas sin lograrlo. Esas decisiones deben aguardar por el consenso del Congreso bipartidista estadounidenses. Pero es innegable que se trata de pasos concretos en un camino definido hacia la normalidad, la cordura y el bien común: Buenas noticias de fin de año. (Por:
Roberto Pérez Betancourt)(29/12/14)
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