Entre los citados elementos aparecen las insuficiencias de la gestión económica interna, lo cual conllevó a que 151 empresas -incluidas varias de la provincia de Matanzas-, cerraran su gestión con pérdidas y acumularan de conjunto un saldo negativo de 439 millones de pesos en el año. El saldo rojo más alto correspondió al Ministerio de la Agricultura, donde 71 entidades evidenciaron resultados deficitarios a escala nacional.
Otro factor de análisis es el indebido pago de salarios sin respaldo económico. Al respecto, José Luis Rodríguez, asesor del Centro de investigaciones de la Economía Mundial y ex ministro de Economía, llama la atención sobre que en el año 2014, un total de 320 empresas pagaron nada más y nada menos que 189 millones de pesos de salarios sin que ese dinero tuviera un respaldo productivo.
Lanzar papel moneda a la circulación sin contrapartida de bienes y servicios, solo contribuye a elevar la demanda solvente sin la imprescindible oferta material, y por consiguiente estimula el crecimiento de los precios.
A propósito, investigadores insisten en la inefectividad de fijar precios bajos de forma administrativa en un mercado abierto a la oferta y demanda, lo que provoca –en la mayoría de los casos– el acaparamiento por los especuladores y el desarrollo de la economía sumergida en las operaciones comerciales.
Y aunque no lo parezca, la caída del precio del petróleo, que sigue descendiendo en estos días, también incide en la economía cubana, porque merma ingresos por exportaciones de portadores energéticos.
Son solo algunos aspectos de la economía que deben tener en cuenta empresarios, directivos, sindicalistas y trabajadores para que dentro de sus respectivas responsabilidades traten de no tropezar con piedras semejantes en 2015, en Matanzas y en todo el país.(Por: Roberto Pérez Betancourt)(15/01/15)
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